martes, 18 de diciembre de 2007

LA ALUCINACION

Luis el viñetas dibujaba caricaturas en las ferias de los barrios, para ganarse la vida, un día a la hora de comer recogió sus cosas y se fue a comer a un bar cercano a la plaza donde se había instalado la ultima feria de Abril. Una vez dentro pidió para comer setas silvestres a la riojana, que engullo despacio deleitándose con su exquisito sabor, al poco de haberse comido el jugoso plato se sintió mareado y su visión de las cosas se volvió borrosa, cuando se aclaro su vista la realidad que lo envolvía era totalmente diferente de lo que siempre había visto, el camarero que le había servido, tenia ahora cabeza de huevo, otros que estaban sentados cerca de el, eran ahora una especie de gusanos, otros roedores, monstruos inimaginables y también había seres inocentemente llamativos, los había en forma geométricas y de una masa viscosa.
Cuando recupero el conocimiento, el doctor, le comunico lo que le había pasado, había sufrido una alucinación y perdido el conocimiento a causa de un hongo llamado sensitus extravagantis que se había mezclado con las setas que ingirió en el bar en el que perdió el conocimiento después de unos instantes de delirio. Aquello hizo pensar a Luis que investigo y recopilo toda la información que pudo de ese curioso hongo, semanas después recorría los montes recogiendo en una cesta de mimbre todos los hongos sensitus que podía, al volver a casa, decidió tomar una pequeña dosis, la suficiente para que le hiciera efecto y que no le hiciera perder el conocimiento, después se miro en el espejo de su cuarto de baño y vio que su rostro era el de un payaso, descubriendo una nueva realidad de la que ya no podía escapar; el mundo que creía real era tan solo un sueño y gracias al hongo podía ver otros mundos quizás mas reales que aquel que había conocido hasta ahora.
Hoy en día Luis el viñetas dibuja laminas de mundos y seres extraños que vende en las ferias de los barrios, si alguna vez lo ves, acercate pues te contara alguna historia de otro mundo y te dirá que no te fíes de lo que ven tus torpes ojos pues no siempre todo es lo que parece. Fin

1 comentario:

Lylbathy dijo...

Con cada uno de tus relatos se aprende algo y este si más no, es muy divertido, no iría mal incluir algunos de esos hongos en el menú de vez en cuando, y como bien dijiste no todo es lo que parece, ni tampoco es oro todo lo que reluce. Soñar, alucinar siempre viendo la realidad. Hoy no tengo demasiado tiempo pero no podía deambular en la noche sin hacerte una visita. Que el viento te acerque también estos besos de sangre y una de mis rosas negras.