lunes, 14 de enero de 2008

EL ACUERDO 1ª PARTE

En un día cualquiera, a principios de año, Tomas Algode ahogaba sus penas apurando una copa de bourbon , en el bar que había frente a la oficina de desempleo de la que acababa de salir, cada vez le desesperaba mas no encontrar un empleo que le ayudara a soportar el peso de la vida, y salir de esta situación en la que se encontraba. Sin apenas dinero para pasar el mes, que cada día le parecía mas largo, intentaba sobrevivir con el poco dinero que aun cobraba de la oficina de desempleo. Después de tres copas debido en parte a la falta de costumbre, al alcohol y a la necesidad de desahogarse empezó a hablar de su desgraciada vida; como todo cambio el día en que su mujer lo abandono por otro, todo le había salido mal desde entonces y se sentía cada vez mas fracasado frente a la vida que sin miramientos seguía aplastandolo día tras día, tan desesperado se sentía que llego a exclamar que seria capaz de vender su alma al diablo, si así conseguia cambiarla.
Fue entonces cuando escucho una voz a su lado que le dijo: "¿ Esta realmente seguro de lo que acaba de decir?. Tomas se giro y vio a un hombre elegante, vestido con un traje negro que lo observaba; aquel hombre no tenia pinta de frecuentar bares, al menos no de tan poca categoría así que Tomas no pudo evitar preguntarle: " ¿ que hace un tipo como usted en un lugar como este? el hombre pidió otra ronda y le dijo: " Vera, me llamo Simón Sergas y estoy buscando a un hombre como usted, como habrá podido apreciar no me falta el dinero, la verdad es que mi economía o mejor dicho la de mi cliente es muy cuantiosa, tanto que si de verdad estuviera dispuesto ha hacer cualquier cosa y no lo haya dicho por decir, podríamos llegar a un tipo de acuerdo." Los ojos de Tomas se abrieron de par en par, aunque las palabras de aquel desconocido le causaron un escalofrío al oírlas, aun siguió preguntando intrigado: ¿ que clase de acuerdo? . Simón le respondió, después de mirarlo durante un instante fijamente a los ojos y murmurar: " Si, podría ser el tipo que andaba buscando....Mire se por lo que a dicho que la vida no le a estado sonriendo mucho, ¿ que le parecería poder hacer todo lo que quisiera? ¿ Poder cumplir todos sus sueños?, ¿ Que haría si pudiera tener todo en sus manos?. Pues eso es lo que vengo a ofrecerle, se que ahora esta sorprendido, pero si acepta y firma el contrato que tengo en mi poder, durante tres años tendrá todo aquello que pueda desear." Tomas pensó que le estaba tomando el pelo, pero la mirada de aquel tipo era muy seria y sincera, sorprendido por los acontecimientos, confuso ante la situación y desconfiado, pregunto: " ¿ Cual es la letra pequeña?, ¿Donde esta el truco de todo esto?". Simón asintió y le respondió: " Nada se da a cambio de nada, efectivamente todo esto tiene un precio que usted debe considerar si esta dentro de lo razonable o no, mi cliente le dará todo aquello que desee para vivir durante tres años a cambio de disponer, después de ese tiempo, de su persona de la mejor manera que crea conveniente y le garantiza que no le causara daño alguno a ninguna parte de su cuerpo, dándole los derechos totales sobre usted a cambio de las retribuciones de esos tres años, se que es una decisión difícil de tomar así que pienseselo." Simón le dio un numero de teléfono donde podría localizarle si se decidía a aceptar el acuerdo, pago las copas y se fue, dejando a Tomas aun mas confuso y sin poder pronunciar palabra alguna por lo que acababa de oír.
Pasaron los días y la vida parecía ponerse en contra de Tomas, cada vez iba de mal en peor, un día casi olvidado aquel encuentro, registrando uno de los bolsillos de su pantalón en busca de alguna moneda que le permitiera comprarse un poco de pan, volvió a ver la tarjeta que aquel tipo le había entregado, pensando que ya no tenia nada que perder, decidió llamarlo. Todo fue muy rápido, Simón apareció enseguida en un flamante deportivo, saco de un maletín un contrato y le dijo a Tomas que lo firmara, una vez realizado ese tramite, llamaría a su banco y dispondría de una cuenta sin limite de dinero para que lo gastara en todo aquello que deseara. Tomas miro a su alrededor, vio la humildad que lo rodeaba y firmo decidido. Simón cogió el contrato, sonrió con una sarcástica sonrisa que estremeció a Tomas y le dijo: " Hasta dentro de tres años ". Lo primero que izo Tomas fue ir al banco; su sorpresa fue la atención que le dispuso el mismísimo Director de la sucursal, comprobando que disponía de todo el dinero que quisiera, empezó a comprar todo aquello que veía, que deseaba o había soñado tener, después compro todo tipo de ropa y comió en los mejores restaurantes de la ciudad, viajo por medio mundo y acomodado por la tranquilidad del dinero fue pasando el tiempo, hasta que un día volvió a ver a Simón, el cual le dijo: " Es hora de dar cumplimiento a su contrato " , enseguida dos hombres que iban con el cogieron a Tomas y le sedaron.
Sus ojos empezaron a abrirse lentamente, no era consciente del tiempo que había permanecido dormido, tan solo se sentía extraño, no podía moverse y aun se sentía aturdido. Frente a él un hombre le contemplaba: " Ah, por fin despierta, temía que no pudiera superarlo, me presentare, mi nombre es Alfonso Lotengo, y soy él que a pagado todos estos años sus gastos, la verdad creo que a sido un precio pequeño ahora que veo que todo a salido bien, lo que hace hoy en día la tecnología o mejor dicho la medicina moderna, o quizás sean ambas cosas, el caso es que tengo que estarle muy agradecido, de no ser por usted aun seguiría sin poder moverme." Tomas le miro y le dijo: " ¿Donde estoy? ¿Porque me siento tan raro?. Alfonso se alejo un poco y volvió con algo entre sus manos que parecía un cuadro, mientras le decía: " No se preocupe, al principio cuesta un poco acostumbrarse pero con el tiempo sera mas llevadero " Tomas vio la cicatriz que llevaba alrededor del cuello Alfonso, era una gran herida reciente y apenas cicatrizada, mientras seguía escuchando lo que decía: " No es de extrañar que ahora se sienta raro, lleva varias semanas inconsciente, la operación a sido costosa y muy complicada , pero a tenido un éxito absoluto." Fue entonces cuando le dio la vuelta y lo que antes parecía la parte trasera de un cuadro, ahora era un enorme espejo que le mostró a Tomas su nueva realidad. Su cabeza pendía de un complejo de cables conectados a una maquina, su grito atravesó toda la mansión al comprender quien era el nuevo dueño de su cuerpo. Fin

1 comentario:

Anónimo dijo...

miauuu..espelucnante relato..me ha gustado mucho..el final es absolutamente demoledor..tienes el don de contar realmente bien las historias que de tu cabeza se escapan..
que tal mi gatito..??
hace mucho tiempo que no pasaba por aqui a escribirte..
como lo llevas??
yo he pasado unos dias muy deprimida..en ese trascurso mi hermana se ha independizado de un modo un tanto brusco..lo que me ha hecho sentirme todavia si cabe mas descolocada..
pero bueno..
creo que vamos saliendo..ahora ando con muchas cosas en la cabeza..espero que pronto vea la luz de una vez..falta me hace..

te dejo aqui un besito muy dulce mi querido angel sin alas..

a ver si charlamos..que ya hace..

te extraño..