El contador de historias

En uno de los camerinos del teatro principal de Madrid, Amadeus termina de maquillarse para la actuación que en pocos minutos comenzara, mientras espera, recuerda como empezó de muy joven a contar historias en las plazas de los pueblos, en antros de mala muerte y en cualquier rincón donde le dejaran contar sus extraordinarias y fantásticas historias, y como la gente se maravillaba y estremecía al oírlas, así fue cogiendo fama y ganandose cada vez mejor la vida, y con ello también los lugares donde las contaba, cafés, teatros pequeños, auditorios de pueblos y alguna ciudad no muy grande, su repertorio crecía de lugar en lugar y fascinaba a todo aquel que lo oía.
Ahora después de tanto tiempo, con el venia toda una compañía de teatro que acompañaba sus narraciones, decorados para las historias y equipos de iluminacion, hacían de cada una de sus actuaciones todo un espectáculo, las grandes ciudades lo aclamaban y los grandes teatros eran ahora su único lugar para contar su cada vez mas amplia lista de historias, su fama había llegado a gran parte del mundo y ya le faltaba poco para dar su siguiente paso y ser reconocido mundialmente. Un golpe en la puerta de su camerino le anuncia que tan solo quedan cinco minutos para el inicio del espectáculo, y Amadeus sale con la aureola que solo tienen las estrellas, él aun con la experiencia de los años no puede evitar emocionarse justo antes de empezar el espectáculo y escuchar el murmullo de la gente tras el escenario, mientras pausadamente sigue caminando hasta el atril que esta dispuesto para él a la izquierda del escenario, para no molestar a los actores,
su publico le espera:
"-Buenas noches amado publico.- con sus primeras palabras todos los presentes ansiosos por oírle le ovacionan.- Esta noche sera diferente a todas las que hayáis conocido, pues atraves de mis palabras , conoceréis otros mundos, donde la linea de la fantasía y la realidad, siempre van entrelazadas, recuerdo una vez, hace mucho tiempo, en un lugar perdido del universo.... -"
Así pasan dos horas y media en apenas un momento, donde historias de miedo, de amor, de aventuras... y otros diversos temas, hacen que afloren sentimientos entre los presentes que como un viaje de sorpresas emocionales van trasportandolos en cada una de sus historias para acabar con un final feliz y una sonrisa en sus rostros, el publico ovaciona a Amadeus poniéndose en pie y el recibe el premio a su esfuerzo y dedicación, mientras todos los que forman la compañía hacen una reverencia a tan grato publico.
Todo a acabado una vez mas y Amadeus se quita el maquillaje en su camerino y se vuelve de nuevo un ser corriente que sale por la puerta de atrás del teatro y deambula por las calles hasta una callejuela para entrar a un bar de mala muerte, por un instante todos los allí presentes le miran y el los observa uno por uno, después sin temor ninguno y sin mediar palabra se sienta al lado de alguien desconocido para el, al que le dice: "- ¿Me permites invitarte a algo, amigo?-" el desconocido lo mira y pide un Wiskie al dueño del local y Amadeus pide que le ponga lo mismo, después de apurar el vaso el desconocido le dice: "- ¿Tu no eres ese de los carteles? ¿ese que cuenta historias? -" sin asombrarse le responde: "- Si, soy yo -", otro wiskie y otra pregunta: "- ¿ como lo haces, para contar esas historias?-" sonriendo le responde: "- es fácil, todas llevan algo mas o menos de fantasía pero mucho de verdad, que tan solo adorno con palabras , donde quito y pongo para hacerlas mas interesantes.- " al tercer wiskie, el desconocido le dice: "- ¿quieres oír una historia de verdad?-" a lo que Amadeus responde "- para eso he venido a este lugar,¿ dime, cual es tu historia?-".
Después de unas horas y unos Wiskies otra misteriosa y extraordinaria historia esta preparada para darse a conocer al mundo y al nuevo día que empieza a despertarse. Fin